Naturaleza y etnografía en el Barranco de Biniaraix
Hablar de paisaje, naturaleza y etnografía es hablar del Barranco de Biniaraix en el valle de Sóller, declarado Bien de Interés Cultural en 1994. Una excursión perfecta para complementar tu estancia en un agroturismo en Mallorca. Un olivar de montaña, típico de la Serra de Tramuntana, en donde es posible ver multitud de ejemplares centenarios y elementos de arquitectura tradicional mallorquina. El camino empedrado es un magnífico ejemplo de la ingeniería tradicional de la piedra en seco e incluye puentes, bancales hechos en las laderas de imponentes acantilados, fuentes o casas de posesión.
Entre los árboles que encontramos destaca la Madona des Barranc, un ejemplar centenario de formas retorcidas y notable belleza, rodeado de otros ejemplares igualmente singulares. La subida al barranco es parte del GR 221, la llamada Ruta de la Pedra en Sec, el sendero de Gran Recorrido que atraviesa la Serra de Tramuntana de lado a lado y que es una magnífica oportunidad para conocer a fondo una de las zonas más bonitas de la isla. El Barranco de Biniaraix forma parte de la 3ª etapa del GR 221 entre Sóller y la Font des Prat, partiendo desde la aldea que lleva el mismo nombre debido a una antigua alquería musulmana.
Lo más destacable de Biniaraix pueblo es su arquitectura integrada armoniosamente con el territorio que la rodea, dándole un encanto especial. Ubicada sobre una pequeña colina, sus calles empinadas y empedradas discurren entre antiguas viviendas de campesinos y señores. Desde Biniaraix es posible visitar otros pueblos del valle de Sóller de mucho encanto como Fornalutx, de calles empinadas con sus características tejas pintadas que se conservan en los tejados y el Museo de Can Xoroi como visita obligada. En su interior conserva una importante colección de tejas pintadas y una antigua almazara. Una excursión ideal para una estancia de agroturismo en Mallorca.